Cuenca se eleva y nos cautiva con su inigualable belleza, sus edificaciones con aires europeos, pero con profundas raíces indígenas, el fresco aroma de las flores en sus concurridas plazas, la majestuosa catedral con cúpulas color del cielo y el paisaje natural que nos envuelve. La riqueza cultural de la ciudad es única y así lo reconoce el mundo entero.
El 1 de diciembre de 1999, la Asamblea General de la UNESCO declaró a la ciudad de Cuenca Patrimonio Cultural de la Humanidad, en virtud de la Convención sobre el Patrimonio Mundial. Son más de dos décadas que la ciudad celebra esta distinción, que nos llena de orgullo y es un gran motivo de celebración.
Con la declaración de Patrimonio de la Humanidad, se busca preservar el conjunto arquitectónico y urbanístico de Cuenca con sus más de 5.000 bienes patrimoniales, así como su entorno paisajístico.
Sus calles adoquinadas nos invitan a recorrerlas sin descanso. Sus murales dan vida a las avenidas. Cada rincón de la ciudad te atrapa con sus encantos y cada vez que la visitas descubres algo nuevo.
Cuando te encuentras con sus hermosas artesanías, te invaden sensaciones que te llevarán a vivir un sueño.
La ciudad se prepara con fascinantes eventos culturales para festejar un año más de su declaratoria. Además, nuestra espectacular oferta hotelera atrae a miles de turistas.
Las tradiciones de su gente y su gastronomía se han mantenido por generaciones y es así como se han convertido en parte del patrimonio de la ciudad. La pasión en sus platillos típicos destaca pues encanta tanto a turistas como locales.
Cuenca es una ciudad histórica, una joya que embellece al Ecuador, y es nuestra misión conservarla y redescubrirla. Vuelve a enamorarte de su cultura, de la amabilidad de su gente, y de las historias que te esperan por disfrutar.
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